martes, 31 de agosto de 2010

Silvia Auré


Colgué hace tiempo una foto en la que compartía escenario con Ana. También tuve la suerte de compartirlo con Silvia, en el espectáculo "Travesía", coproducción del Centro Dramático de Aragón, Embocadura y Arbolé. Trabajar con Silvia, a uno u otro lado del escenario, es siempre un aprendizaje profesional y humano. Gracias por estar aquí. Fotografía de Carlos Madrid. (M.A.)

Pausa

En el teatro es fundamental el manejo de las pausas. En el propio ritmo de los ensayos también. Siempre que la producción lo permite procuro hacer un paréntesis en el trabajo cuando el espectáculo está ya casi (in)terminado. Escribía en la entrada anterior que buscábamos ese punto de sazón en el que todo el trabajo acaba por cuajar, en el que todos los artificios que hemos puesto laboriosamente en marcha dejan paso a una fluida madurez comunicativa. Pues bien, en lo esencial ese momento ha llegado ya. Así que nos permitimos una semana de descanso, en la que habrá de darse algo semejante al trabajo del sueño, cuando bajo la apariencia de reposo el cerebro procesa y reelabora los restos de la vigilia. A la vuelta seguiremos a la caza de detalles que tendrán ya un lecho firme y flexible, vivo, sobre el que asentarse. (M.A.)

viernes, 27 de agosto de 2010

Interminable

El teatro, por fortuna, nunca está terminado. Los ensayos son eso, lo que su nombre indica: ensayos, pruebas, tentativas, aproximaciones, hipótesis de trabajo. En su momento llegará, con los espectadores, el teatro. Cada día, cada función, un nuevo espectáculo. Sobre la última etapa de ensayos planea una extrañeza especial: el esfuerzo de imaginación para suponer un público. Quienes andamos en la cocina donde se cuece el futuro teatro somos el peor público posible. ¿Qué podemos hacer? Imaginar, suponer, atrevernos a anticipar las exigencias de un espectador de verdad. Por lo demás, precisar maniáticamente detalles con objeto de que (todo aquí son paradojas) la actriz encuentre finalmente la libertad. Que la emoción, y ante todo la emoción de comunicar, encuentre el cauce adecuado para fluir, no teniendo ya que pensar (si eso fuera posible), no teniendo que atender a otra cosa que a estar ahí, participando en una reunión de personas dispuestas a compartir una experiencia. (M.A.)

domingo, 22 de agosto de 2010

Confianza

Cada proceso de ensayos es único, pero como en la vida misma (esto es una vida misma condensada) se dan ciertas constantes, aunque el ritmo de su aparición sea en cada ocasión diferente. A estas alturas del trabajo hemos atravesado descubrimientos, dudas, certezas, decepciones, euforias, ansiedades, risas, inquietudes… Páramos, bosques, dunas, riscos, vergeles… Entreviendo ya la desembocadura, el cauce ya sereno, bien que siempre mudable, confianza. (M. A.)

jueves, 19 de agosto de 2010

Poesía

Andamos tanteando a la caza de una clave de actuación un tanto esquiva. Sabemos a qué decir no. No a la “cuarta pared”. No a las convenciones de seudonaturalidad forzada. No a la declamación supuestamente poética. No al sermón didáctico. No a la gesticulación vacía. No al hieratismo. No a la ilustración. No a la saturación. Para no seguir enumerando: no a cualquier cosa que no responda a una necesidad.
¿Qué nos pide el texto? Hay que preguntárselo en serio, puesto que el texto ha sido el punto de partida de la aventura. Quien habla es una escritora, así que en varios sentidos es imprescindible el respeto a la palabra. Pienso que el teatro ha de ser en cualquier caso un lugar de respeto a la palabra (y por lo tanto de respeto al silencio), pero la presencia de la escritura como tema lo hace especialmente exigible.
Necesitamos poesía, y no es fácil saber de qué estamos hablando. Poesía necesaria, que decía Celaya. “El cuerpo poético”: así tituló su libro el maestro Lecoq. En efecto, la poesía en el teatro reside ante todo en el cuerpo, y es desde el cuerpo como puede circular en el aire compartido con el espectador. Una conciencia corporal relajada y abierta permite que ese algo flotante sin definir que aguza la percepción se encargue de mitigar la sequedad del pensamiento. ¿No ha de ser esto una historia de amor? (M.A.)

martes, 17 de agosto de 2010

Sobre los Ilustradores participantes. Isidro Ferrer

Isidro Ferrer
Diplomado en Arte dramático y escenografí­a. Combina su actividad de diseñador gráfico con una intensa labor en otros campos de la imagen como la ilustración, tanto para adultos como para niños, la realización de comics, animaciones para TV, o la edición. Cuenta con más de 30 libros publicados. Su obra ha sido objeto de exposiciones individuales en Huesca, Madrid, Gijón, Barcelona, Valencia, Palma de Mallorca, Toulousse, Lisboa, Rouen, Rijeka, Bogotá, Quito, Turín, Parí­s, México, Santiago de chile, Tegucigalpa, El Salvador, Marsella, Lima, y participado en numerosas exposiciones colectivas en distintos lugares del mundo.
Ha recibido varios premios por su labor como ilustrador y grafista, entre ellos: un Premio Lazarillo de Ilustración, un 3er premio en el
12 Festival internacional de carteles de Chaumont (Francia), un premio Promax oro de animación para TV (Canadá), tres premios AEPD, un LAUS, un premio “Daniel Gila” de edición, Premio Junceda, premio Experimenta, Visión de oro de creatividad exterior, Poster European Design Award (Estocolmo) Es premio Nacional de Diseño (2002), Premio Nacional de ilustración (2006), y desde el año 2000 es miembro de la Alianza Gráfica Internacional (AGI).
Más info: www.isidroferrer.com

Recitando los poemas del texto. Saúl Esclarín

lunes, 16 de agosto de 2010

Una secuencia

Una muestra de trabajo sobre una escena con cambios de posición sobre el suelo.

viernes, 13 de agosto de 2010

Teatro y danza (más)


Al parecer, en japonés hay una sola palabra para teatro y danza. Hay visiones de la danza que la avecinan al deporte, otra a las artes visuales, otras al teatro. De algún modo tiene que ver con la mayor o menor presencia de procesos de significación. No se trata de la existencia de un argumento unívoco: la significación puede adoptar diferentes grados de ambigüedad, sin que por ello desaparezca la intención comunicativa.
En el trabajo que nos ocupa, la danza no tiene un lugar central. Muy claramente está presente en función de un proceso comunicativo global en el que el lenguaje verbal es dominante. Sin embargo, es preciso que “el verbo se haga carne”. Un cuerpo en movimiento da al lenguaje una rara e intensa hospitalidad: de una frase leída en un libro a la misma frase escuchada en el teatro hay un abismo. Entre cuerpo y lenguaje se establece una lucha en la que el único vencedor es la emoción que resulta de su frágil convivencia.
De acuerdo con Silvia, rebajamos en algunos momentos la precisión del dibujo coreográfico en beneficio de la continuidad de la presencia corporal. La clave está en desplazar el acento en mayor o menor medida al protagonismo del cuerpo para reforzar el sentido global de la propuesta: cuerpo y palabra, emoción y pensamiento van de la mano con la esperanza (quizá insensata) de movilizar algo en la emoción y el pensamiento del espectador. (M. A.)

martes, 10 de agosto de 2010

Coreografiando



Silvia se ha reincorporado al trabajo después de un paréntesis. Dedicamos esta semana prioritariamente a los momentos más abiertamente coreografiados, sin dejar de retomar pases completos en los que seguimos observando modificaciones. Había dos coreografías iniciadas, que se siguen puliendo y transformando, y una nueva, con otra música que ha compuesto José Luis. Revisamos también fragmentos en los que Silvia ayuda a precisar movimientos que no tengan aspecto coreografiado.

viernes, 6 de agosto de 2010

Conjunto y detalles


Alternamos pases completos con ajustes de detalle. En ese vaivén vamos localizando puntos que arrojan luz sobre el conjunto, y viceversa. No hay peor cosa que ver a un actor hacer algo que se nota que hace porque se lo ha impuesto el director. Cuando algo de eso se percibe, hay que averiguar dónde está el problema para despejarlo. Ha fallado el diálogo, y es preciso refrescarlo. Es obligación del director no encariñarse con sus ideas. No se hace teatro con ideas abstractas. Bastan unos segundos de fractura de la continuidad para que el conjunto se resquebraje. Ensayar es estar al acecho de cualquier punto de fuga. M. A.

miércoles, 4 de agosto de 2010

Recitando los poemas del texto. Ana García

Vestuario


Asun lleva algún tiempo dándole vueltas al vestuario, asistiendo a ensayos, recorriendo tiendas, dibujando, trayendo muestras de tejidos... Poco a poco, tras muchas dudas y en diálogo con actriz y director, se va configurando la idea y pronto empezará la realización. Será importante sobre todo en la última fase de ensayos, para terminar de perfilar el personaje. Una discreta elegancia.

martes, 3 de agosto de 2010


Ana ha conseguido memorizar ya todo el texto. ¡Bravo por ella! Sin papeles en la mano, vamos entrando en detalles. Estamos en una fase del trabajo menos gratificante pero igualmente imprescindible. Con la colaboración de Iguazel y de Saúl, que controlan para no dejar pasar una, se trata de afianzar la exactitud del texto, cronometrar tiempos (todavía aproximados) para que José Luis pueda ir ajustando la música y repetir fragmentos las veces que haga falta. En fin, una etapa intermedia, un poco árida, entre la primera de descubrimientos y la última de dejar de pensar reencontrando la libertad y la continuidad emocional. No por eso dejamos de encontrar sobre la marcha novedades y replantear situaciones. La vida sigue en cada momento, y nunca se sabe lo que nos va a sorprender en cada sesión de trabajo.

Recitando los poemas del texto. Mariano Anós

Abrimos con esta entrada una serie de videos en los que diferentes personas recitarán algunos de los poemas del texto del espectáculo LA HISTORIA DE AMOR DEL SIGLO escrito por Märta Tikkanen. El primero de ellos ha sido el elegido por el propio Director del espectáculo, Mariano Anós.

lunes, 2 de agosto de 2010

Componiendo. Por José Luis Romeo



Musicalmente es posible que sea la obra más compleja en la que he trabajado después del Iceberg. Pero por razones distintas. En este caso es por la temática, que por diferentes motivos me condiciona.Al principio del trabajo, con Mariano planteamos una serie de cuestiones respecto a la sensación que queríamos crear. Ya que no deja de ser una versión subjetiva de un hecho.Así que planteamos empezar desde el final. Creando diferentes ambientes o situaciones en la que esta persona cuenta sus vivencias. Pero a mi algo no me encajaba. Hasta que Mariano (con él me entiendo a la perfección) pasó la obra a prosa y eliminó algunos pasajes.La música condiciona totalmente la sensación al espectador y lo que yo pretendía era que fueran las palabras y la actriz las que no se dejaran llevar emocionalmente por la música. Pero sí quería crear unos ciertos ambientes que le dieran la posibilidad de poder cambiar de registros.En un principio me planteé trabajar con una sección de viento. Pero me di cuenta de que cualquier intervención humana, por simple que fuera, transmitiría una emocionalidad que no quería. Establecí unos sonidos básicos: una máquina de escribir, unos pasos, un tren... Y me marqué unas pautas musicales que no viene a cuento explicar.Cuando decidí una serie de conceptos, me planteé si desarrollarlos de una forma racional u optar por algo más espontáneo.Me marqué unas bases y con la guitarra midi, ya que no quería utilizar los teclados, empecé a buscar sonido y a grabar y a grabar todo lo que viera interesante, sin preocuparme de estructuras ni de normas convencionales. De ahí salieron varias ideas que le enseñé a Mariano y estuvo de acuerdo. Cuando las probamos funcionaban.Sólo en un momento habrá un tema que tocaré con la guitarra española.Ahora estoy en un punto de búsqueda de ideas que me faltan y el 18 de Agosto me encerraré en los Estudios Inguz, con Juanmi, con el que llevo años colaborando, para trabajar de una forma diferente.Grabaremos todo que que se nos ocurra y sin ningún tipo de condicionante, dejando que fluya todo. Para mí sería más fácil limitarme a escribir de una forma convencional, pero este tema es tan delicado que creo que lo tengo que enfocar de otra manera. La música ante todo tiene que trasmitir y comunicar, para ello hay que ser generoso y pensar en los demás más que en tu propio lucimiento o estado personal. Y no es fácil. Me está costando mucho porque, por diferentes motivos personales, tengo que mantener un cierto distanciamiento.